Cumpliendo con su misión prioritaria de llevar a cabo investigación básica e interdisciplinaria en el campo de la bioingeniería y nanomedicina al más alto nivel internacional, el IBEC ha publicado en la última década más de 740 artículos científicos en revistas de alto índice de impacto, más de la mitad de ellas en el primer decil. Su producción científica está avalada por el Consejo Europeo de Investigación (ERC), con la prestigiosa financiación competitiva de 11 proyectos. Además, 6 de sus investigadores principales reciben el apoyo de ICREA, la Institución Catalana de Investigación y Estudios Avanzados que se orienta a la contratación exclusiva del personal científico y académico con más talento.
Por otro lado, el Instituto, que también es socio de otras muchas alianzas, ha coordinado y/o coordina cinco consorcios internacionales de proyectos financiados por la UE en el marco de los programas FP7 y Horizonte 2020.
Entre sus descubrimientos científicos cabe destacar el primer bazo en un chip (en inglés, splenon-on-a-chip), la plithotaxis -un nuevo concepto en biología-, avances innovadores en la creación de fármacos fotoactivables, el descubrimiento de mecanismos cruciales en el desarrollo del cáncer de mama, la resolución de un enigma de la química y el desarrollo de nanorobots de última generación, entre otros.
Con la misión de transferir sus conocimientos y tecnología al sector biomédico, el IBEC colabora con hospitales y con la industria para que los dispositivos y productos basados en su investigación puedan ser llevados al mercado y los hospitales. Con 23 patentes en su haber y 3 spin-off, el IBEC puede atribuirse avances tales como las nuevas moléculas contra el cáncer de páncreas, un indicador de somnolencia para vehículos, nuevas partículas para la curación heridas y muchos otros avances ahora en proceso.
A través de Memorandos de Entendimientos y otras alianzas oficiales, el IBEC colabora con organizaciones académicas internacionales de 13 países diferentes, destacando de entre las innumerables redes nacionales e internacionales de las que forma parte, su papel como socio fundador del consorcio EIT Health, una de las mayores iniciativas mundiales para la salud financiada con fondos públicos.
Con el interés de formar a la próxima generación de expertos en tecnología de la salud, hasta la fecha 104 estudiantes de doctorado han defendido sus tesis en IBEC y sus estudiantes y otros investigadores han trabajado en prestigiosas instituciones y empresas de todo el mundo y han contribuido con su trabajo a grandes avances científicos.
Esta es la vertiginosa carrera de un centro que se fundó a finales del 2005 con apenas cinco grupos de investigación de la Universidad de Barcelona y la Universitat Politècnica de Catalunya y que hoy en día se enorgullece de todos y cada uno de sus logros, porque que le aproximan a su objetivo de convertirse en referente mundial en bioingeniería, para mejorar la salud y la calidad de vida de las personas. Es por todo ello que en 2015 fue reconocida con la acreditación a la Excelencia Severo Ochoa por el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.
