El investigador del IBEC Giuseppe Battaglia ha recibido una “ERC Proof of Concept Grant”. Se trata de una prestigiosa financiación que concede el Consejo Europeo de Investigación para explorar el potencial comercial y social de proyectos de investigación llevados a cabo en instituciones europeas. El proyecto de Battaglia se centra en el desarrollo de nuevas terapias antiinflamatorias basadas en nanomedicina y contará con una financiación de 150.000 euros durante 18 meses.
Giuseppe Battaglia, profesor de investigación ICREA y líder del grupo de Biónica Molecular en el IBEC, ha sido galardonado con una “ERC Proof of Concept Grant”. Se trata de una prestigiosa subvención que concede el Consejo Europeo de Investigación (ERC, por sus siglas en inglés) y tiene como objetivo explorar el potencial comercial y social de proyectos de investigación que están o han sido financiados previamente por el ERC.
En el caso de Battaglia, ya había recibido dos becas ERC anteriormente, una “Starting Grant” en 2011 y una “Consolidator Grant” en 2018 cuya financiación finalizó este año.
El proyecto por el cual ha recibido esta nueva subvención lleva por título “nanomedicinas metabólicas antiinflamatorias” (MAIN, por sus siglas en inglés) y estará dedicado al desarrollo de nuevas terapias antiinflamatorias basadas en nanomedicina.
La inflamación es un elemento defensivo característico de la respuesta inmunológica. Sin embargo, cuando está fuera de control, causa daños graves a corto y largo plazo llegando a convertirse en una característica patológica de varias enfermedades, como son los trastornos autoinmunes, el cáncer y la neurodegeneración. Por ello, la inflamación es uno de los objetivos farmacológicos más importantes.
Con el proyecto MAIN, Battaglia y su equipo proponen diseñar nuevos nanofármacos que actúen directamente sobre los principales reguladores de la inflamación, previniendo así los efectos nocivos de la respuesta inmune fuera de control. Estos fármacos son micelas o vesículas que encapsulan en su interior moléculas que se encuentran de forma natural en el cuerpo y pueden activar la capacidad de las células para controlar la inflamación. Concretamente, buscan que el fármaco dirija su acción hacia los macrófagos proinflamatorios y los reprograme para llevar a cabo una acción antiinflamatoria.
Son varios los pasos a seguir en los 18 meses que dura el proyecto. El equipo llevará a cabo varias formulaciones de nanofármacos para estudiar cual es la más óptima y validará su funcionamiento in vitro a partir de modelos de trastornos autoinmunes – diabetes, artritis reumatoide y esclerosis múltiple -. Finalmente, estos datos se utilizarán para poder presentar la solicitud de varias patentes, además de explorar la posibilidad de crear una empresa emergente que les permita seguir trabajando para llevar esta tecnología a la aplicación clínica.