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Científicos del IBEC e ISGlobal desarrollan un compuesto innovador eficaz contra malaria y leishmaniosis

Un estudio liderado por el IBEC e ISGlobal ha demostrado el potencial antileishmanial de un compuesto antimalárico. Diseñado inicialmente para la malaria, este fármaco muestra una elevada eficacia contra la leishmaniosis, marcando un avance único y prometedor para el tratamiento de ambas infecciones.

De izquierda a derecha: Yunuen Avalos-Padilla, Lucía Román-Álamo y Xavier Fernàndez-Busquets (IBEC – ISGlobal)

La leishmaniosis, una enfermedad que afecta anualmente a entre 700,000 y 1 millón de personas en todo el mundo, es especialmente prevalente en poblaciones desfavorecidas. Transmitida por parásitos del género Leishmania a través de la picadura del flebótomo, un insecto similar al mosquito, las formas cutánea y visceral de la enfermedad son endémicas en Europa, con el 80% de los casos cutáneos concentrados en el Mediterráneo Oriental.

Los medicamentos actuales para tratar esta enfermedad enfrentan desafíos como resistencia, toxicidad y costos elevados. Por ello, es urgente identificar nuevos agentes terapéuticos con enfoques innovadores para abordar estas dificultades.

En este contexto, un equipo liderado por el grupo de investigación de Nanomalaria del IBEC y el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) ha explorado un enfoque innovador para tratar la leishmaniosis basado en los hallazgos recientes en malaria.

Sorprendentemente, YAT2150 resultó ser muy efectivo también contra la leishmaniosis, situándonos en una posición única, ya que ambas enfermedades son las principales causas de mortalidad por parásitos en humanos.

Xavier Fernàndez Busquets

La investigación, publicada en la revista científica Antimicrobial Agents and Chemotherapy, se centra en la acción in vitro del compuesto YAT2150, originalmente diseñado como un potente medicamento contra la malaria. “En el marco de un proyecto anterior centrado en mejorar la eficacia de fármacos conocidos contra la malaria mediante encapsulación, surgió la idea de probar el compuesto YAT2150. Sorprendentemente, resultó ser muy efectivo también contra la leishmaniosis, situándonos en una posición única, ya que ambas enfermedades son las principales causas de mortalidad por parásitos en humanos.”, explica Xavier Fernàndez Busquets, líder del estudio e investigador principal de IBEC-ISGlobal

Los resultados del estudio sugieren que YAT2150 podría actuar inhibiendo la agregación de proteínas en las células de Leishmania, el mismo modo de acción que ya se ha observado en el parásito de la malaria. Esta capacidad de actuar eficazmente contra ambos, Plasmodium y Leishmania, posiciona a YAT2150 como un candidato prometedor para el tratamiento de coinfecciones de ambos parásitos.

Actualmente, el equipo trabaja para avanzar hacia la siguiente fase de la investigación, que implica probar el fármaco en modelos de leishmaniosis en ratón. Un paso crucial hacia el desarrollo de un tratamiento innovador.

El poder de la encapsulación

El trabajo también aborda los efectos de encapsular el fármaco dentro de liposomas. Esta estrategia no solo amplía su ventana terapéutica, potenciando su letalidad contra el parásito y reduciendo la toxicidad para el resto de células, sino que también permite dirigir el fármaco específicamente a las zonas del cuerpo de interés.

Hemos dado con algunos fármacos derivados del YAT2150 que muestran índices de selectividad para el parásito de la malaria de 1.000, 2.000 o incluso 3.000. Son resultados muy prometedores.

Lucía Román-Álamo

Por otro lado, un indicador clave para conocer la especificidad de acción de un fármaco es el índice de selectividad: “Para que un fármaco sea considerado para llegar a fases de desarrollo y ensayos clínicos, su índice de selectividad debe ser mayor a 100. En nuestro caso, hemos dado con algunos fármacos derivados del YAT2150 que muestran índices de selectividad para el parásito de la malaria de 1.000, 2.000 o incluso 3.000. Son resultados muy prometedores.”, destaca Lucía Román-Álamo, estudiante de doctorado en el grupo de Nanomalaria y primera autora del estudio.

El trabajo ha contado también con la colaboración del grupo de investigación de Diego Muñoz-Torrero en el Instituto de Biomedicina de la Universidad de Barcelona (IBUB) que se encargó del desarrollo de la familia de fármacos derivados de la molécula madre YAT2150.


Artículo referenciado:

Lucía Román-Álamo, Yunuen Avalos-Padilla, Inés Bouzón-Arnáiz, Valentín Iglesias, Jorge Fernández-Lajo, Juan M. Monteiro, Luis Rivas, SHOW ALL (15 AUTHORS), Xavier Fernàndez-Busquets. Effect of the aggregated protein dye YAT2150 on Leishmania parasite viability. Antimicrobial Agents and Chemotherapy (2024). DOI: 10.1128/aac.01127-23