Inicio del proyecto para desarrollar una nueva nariz bioelectrónica
Los avances en tecnologías para la percepción de moléculas odorantes e inteligencia artificial han redescubierto el uso del olfato en diferentes campos, tales como la alimentación, el diagnóstico de enfermedades, la seguridad y el medio ambiente. Los sistemas de olfacción o narices electrónicas que existen actualmente, basados en sensores electrónicos, tienen importantes limitaciones respecto a su sensibilidad, fiabilidad y selectividad.