Un ejército de nanorrobots circula utilizando como combustible urea. Su misión: transportar radiación para atacar las células malignas de la vejiga. No es ciencia ficción, sino el avance que han logrado Meritxell Serra-Casablancas y Samuel Sánchez en el Institut de Bioenginyeria de Catalunya (IBEC), y que han publicado en Nature Nanotechnology. Su estudio ha demostrado que estos nanorrobots tienen una alta eficacia para reducir el volumen de los tumores en ratones.